Resfriado en el embarazo: ¿cómo combatirlo?

Durante el embarazo, es esencial cuidar tu salud y prestar especial atención a tu sistema inmunológico. Este puede volverse más vulnerable en esta etapa, lo que aumenta tu susceptibilidad a infecciones virales comunes, como el resfriado.

En Bupa Seguros, te brindamos información clave sobre los síntomas del resfriado en el embarazo, cómo prevenirlo de forma segura y cuándo es necesario que acudas al médico.

¿Cuáles son los síntomas del resfriado en el embarazo?

Debido a los cambios hormonales y a la supresión del sistema inmunológico, los síntomas del resfriado en el embarazo pueden ser más intensos e incluso durar más tiempo. Algunos de ellos son:

• Congestión nasal: a nivel de nariz y cara, caracterizada por una sensación de taponamiento que dificulta la respiración normal.
• Goteo nasal: también conocido como rinorrea, es una descarga nasal de flema causada por un exceso de mucosidad que fluye por la nariz. 
• Estornudos frecuentes: producto de la irritación de las membranas mucosas de la nariz o de la garganta.
• Molestias en la garganta: que pueden provocar una sensación rasposa, irritada y dolorosa.
• Tos: tanto con flema como seca, se produce por una irritación de las terminaciones nerviosas de las vías respiratorias. 
• Fatiga: o cansancio corporal, debido a la lucha de tu organismo contra la infección viral.
• Dolores corporales: como dolores musculares y articulares en todo el cuerpo.
• Fiebre leve: es decir, una ligera elevación de la temperatura corporal que puede causar calor y sudoración.

¿Cómo aliviar los síntomas del resfriado en el embarazo?

Algunas consejos que puedes seguir para aliviar un resfriado en el embarazo son:

1. Descansa tanto como lo necesites: Realizar pausas a lo largo del día, tomar siestas y dormir entre 7-8 horas por noche te ayudará a recuperarte de forma efectiva.
2. Mantente hidratada: Bebiendo mucho líquido, incluyendo agua, jugos naturales, infusiones (de jengibre o limón con miel), té y sopas. Estos te ayudarán a mantener las membranas mucosas húmedas y a aliviar la congestión nasal y la garganta seca.
3. Inhala vapor: Usando un humidificador de vapor frío o tomando una ducha caliente. Las vaporizaciones pueden ayudarte a aliviar el dolor de garganta, la congestión nasal y a expulsar la mucosidad con mayor facilidad.
4. Realiza gárgaras con agua salada: Al hacer gárgaras, el agua salada llega a la parte posterior de la garganta y la nariz, lo que mejora la inflamación, reduce la congestión, elimina las bacterias y afloja la mucosidad en esta zona.
5. Aliméntate bien: Consumiendo alimentos nutritivos como frutas, verduras, proteínas magras y granos enteros.

Recuerda que durante un resfriado en el embarazo, es crucial buscar atención médica si presentas fiebre alta (38 °C o más), dificultad para respirar que no mejora con medidas simples, signos de deshidratación como sequedad en la boca y mareos, o si tienes dudas sobre el tratamiento adecuado.

En este sentido, contar con una cobertura médica durante el embarazo es fundamental. Esta cobertura no solo asegurará un seguimiento regular de tu salud y la de tu bebé, sino que también te brindará la tranquilidad necesaria en este momento tan importante de tu vida.

¿Cómo prevenir el resfriado en el embarazo?

Entre las medidas que pueden ayudarte a reducir el riesgo de contraer un resfriado en el embarazo se encuentran:

• Lavarse las manos: frecuentemente, con agua y jabón, durante al menos 20 segundos, para eliminar los gérmenes. Es imporante hacerlo después de estar en lugares públicos, antes de comer y luego de sonarte la nariz.
• Guardar una distancia segura: con personas que estén tosiendo o estornudando, para así reducir el riesgo de exposición a los virus respiratorios.
• Evitar tocarse la cara: sobre todo los ojos, la nariz y la boca, ya que estos son los puntos de entrada comunes para los virus responsables del resfriado.
• Mantener un estilo de vida saludable: siguiendo una dieta equilibrada, llena de vitaminas y minerales esenciales, haciendo actividad física regularmente y durmiendo lo suficiente. 
• Evitar el estrés: El estrés debilita tu sistema inmune, por lo que debes encontrar formas para gestionarlo, especialmente durante esta etapa. 
• Vacunarse contra la gripe: La vacuna contra la gripe es segura y puede ayudarte a prevenir el resfriado en el embarazo, por lo que es recomendable que te la apliques al inicio de la temporada de virus respiratorios (otoño).

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